...Ahora las agujetas !!
Y es que todo parece ser problemas en esto de las prácticas deportivas. Si no es por que llueve, es porque hace frio, o calor, ese maldito flato y ahora las agujetas, siempre problemas.
Para este tema tenemos modelos más concretos que se acercan y casi dan por hecho, cuales son los mecanismos que desencadenan estas molestias.
Rotura de fibras musculares:
Las fibras musculares conforman nuestros músculos, las hay de contracción lenta y rápida, y estas mismas fibras están a su vez formadas por otras estructuras más pequeñas. Esta teoría explica que la práctica de ejercicio produce roturas en estos niveles estructurales mas pequeños (Sarcomeros¹), denominándolos microrroturas, se producen sin un orden lógico y se suelen concentrar en las fibras de contracción rápida de los músculos.
Aumento de Temperatura:
Como si se tratase de un motor, nuestros músculos producen calor en su trabajo y se sobrecalientan. Este sobre calentamiento que llega a superar los 50º produce la muerte de las células musculares. Con lo cual, esta teoría no es más que una explicación más a la ya mencionada arriba.
Aumento de la concentración de Acido Láctico:
Completamente desechada; trataba de que la concentración de acido láctico en los ejercicios intensos se cristalizaba al enfriarse, provocando este dolor al “pinchar” estos cristales en el interior del musculo. Bueno, pues el lactato no se cristaliza a temperatura corporal, y ni si quiera en un frigorífico, de hecho, se han realizado biopsias musculares para tratar de encontrar estos “desechos cristalizados” y no se ha visto nada.
Aunque la rotura de las fibras es aleatoria, el dolor se concentra en los extremos de los músculos, allí donde se mezclan tejidos conectivos y fibras musculares y donde están sometidos a mayores tensiones y con ello más probable su rotura.
Desechando mitos…